Si tú trabajas como contratista independiente, probablemente muchas veces pierdas sueño pensando qué pasaría si algún día sufres un accidente mientras estás en tu trabajo. No quieres ni imaginar la posibilidad de que eso suceda y que todos los gastos corran por tu cuenta. Sabes que sería demasiada plata y no los podrías pagar o que representaría una gran carga para tu familia.
Cuando trabajas para una empresa y ellos te están descontando todas las semanas o quincenas, no tienes problema en pensar sobre estos temas. Simplemente, eres empleado de ellos con todos los derechos y responsabilidades.
Pero hoy en día muchas empresas prefieren contratar a la gente con el título de “contratista independiente” y ése puede ser tu caso. Te hacen sentir que ser “contratista independiente” es algo muy bueno porque puedes trabajar para mucha gente sin obligación alguna hacia un empleador y tal vez tengan razón. Así, ellos te pagan en efectivo o te dan un cheque y no te descuentan absolutamente nada de impuestos. Pero no solo eso, sino que tampoco te ponen en compensación laboral.
Afortunadamente, en muchos de estos casos, a pesar de que su empleador te tenga como “contratista independiente”, sí se puede probar que en realidad eres empleado de la empresa.
Las cosas cambian cuando se trata de la industria de la construcción. En ese caso, se cuenta con un Contratista General. Él es el responsable de la obra y trae a los subcontratistas, por ejemplo de electricidad, plomería, tablarroca o yeso y pintura, por decir algunos. Estos subcontratistas traen a su gente o también a su vez subcontratan a la persona que les va a traer a los trabajadores.
En esos proyectos viene tanta gente a trabajar que es inevitable que muchos de ellos no tengan papeles y se les pague en efectivo. ¿De quién es la responsabilidad cuando hay un accidente en el trabajo en estos casos? Siempre se le puede reclamar al Contratista General.
Es importante saber que la demanda puede cubrir dos aspectos: pérdida de ingresos y beneficios médicos.
Los beneficios médicos incluyen desde consultas con el médico hasta tratamientos, operaciones, terapias y rehabilitación.
Para lograr colectar por pérdida de ingresos, como en el caso de cualquier empleado que no esté en la nómina ni haya pagado sus impuestos ni presentado una declaración, va a ser algo más complicado comprobar cuántos o cuáles fueron los ingresos, pero tu abogado de accidentes te puede ayudar a obtener el mejor resultado de tu reclamación.
Ponte en manos de un experto si has sufrido un accidente en el trabajo. No importa que seas un contratista independiente, tienes derecho a reclamar desde el primer minuto del primer día que estés trabajando ahí.
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